Otra regla de oro del AnCom: Jamás de adhieras a él de modo fanático. El AnCom rechaza abiertamente y en su totalidad cualquier tipo de fanatismo en todas sus formas. Se promoverá siempre el equilibrio y la moderación, evitando cualquier extremo, que decimos lleva a la falta de juicio crítico. Consideramos que el fanatismo siempre derivará en violencia, opresión, y censura, socavando los principios de libertad que buscamos promover y que sustenta nuestra ideología.

Se reconoce que el fanatismo político deriva en extremismo y puede resultar en la fomentación de violencia, que generará como respuesta aún más violencia. Algo que va totalmente en contra de nuestra ideología. Así mismo, de ninguna manera promovemos el fanatismo ni siquiera hacia nuestra propia ideología, y se fomenta la autocrítica y humildad del movimiento. Como ya he mencionado también se valora el individualismo e interpretaciones propias, por lo que el dogmatismo inclusive dentro de nuestra ideología es algo con lo que no estamos ni estaremos de acuerdo.

La intolerancia religiosa está totalmente rechazada y mal vista, y cualquier religión que prohíba la crítica o tome una actitud que promueva el odio o que desprecie a otras creencias no tiene lugar en las filas del AnCom. Se considerarán a las mismas como opresivas.

La creencia de que una cultura es superior a otra, o que una forma de comedia es superior a otra, se considera, dependiendo el grado, una manera clara de opresión y muestra de odio, así como también de discriminación. La idolatría en este sentido resultará mal vista, y se promueve el respeto y tolerancia por la diversidad tanto humorística en general como cultural.